Protestas masivas en Europa por el alto costo de vida. Una industria debilitada, irónicamente, por el aliado más cercano: EE.UU. Aun cuando las sanciones, las guerras comerciales y otras iniciativas estadounidenses atentan contra sus intereses, los funcionarios europeos siguen aceptando las condiciones que impone ese país. Los medios occidentales culpan a Rusia de la crisis, pero ¿quiénes se beneficiarían realmente de la depresión económica? ¿Volverá Europa a tener una política independiente?