Acompañar a una unidad de artilleros rusos y ver cómo trabajan sobre el terreno aporta muchas claves sobre la realidad en el frente de Donbass: observar la coordinación de los soldados, la meticulosidad con que realizan las tareas de reconocimiento, el ágil manejo del armamento y su mantenimiento en condiciones óptimas. A la vista está que la artillería del Ejército ruso, con producción y estándares de armamento propios, le permite ejecutar sus tácticas de batalla con precisión y solvencia.